lunes, 13 de agosto de 2012

El porcentaje perverso



Dice Felix Ovejero en el libro colectivo en el que participa “El saber del ciudadano” y en el apartado “La democracia liberal”:   La acción política consiste en buena medida en establecer qué es lo que puede cambiar y qué es lo que no. Pero “qué se puede cambiar”, qué se da por supuesto y qué no, depende de “maneras de mirar” que están asociadas a las propias experiencias. Y lo cierto es que tenemos una disposición a aceptar como naturales, como inamovibles o no discutibles las convicciones o las pautas que son nuestras. Los procesos de socialización (el mundo en donde se vive) condicionan la percepción y la consideración de los problemas y llevan a considerar  como “naturales” —no modificables— ciertas cosas. En consecuencia, hay ciertas propuestas que “ni se les ocurren” y, por ello, no aparecen en la oferta política. La descripción de un problema es, por lo general, un diagnóstico. Si decimos que “el pasado invierno murieron como consecuencia del frío doscientas personas en la ciudad”, estamos excluyendo otras descripciones; por ejemplo, “murieron de pobres” y, con ellas, otras respuestas. Hay una elección acerca de qué es lo “normal”, elección que tiene implicaciones prácticas”.”

Es indudable, que la elección de lo que se puede mejorar, a través de la acción política, es quizás lo que entraña mayor complicación, toda vez que los frentes que pueden ser atacados son diversos y en algunas ocasiones incluso antagónicos; es por tanto un ejercicio práctico sutil de toma de decisiones. Todo ello en circunstancias normales, si añadimos el “condimento” de crisis, la cuestión tiene una complicación exponencial.

Dice el autor citado, que depende de la “manera de mirar” del decisor, asociada - claro está -  con sus experiencias; lo que lo convierte en un ejercicio de mayor complejidad. Hay cuestiones que no son abordadas por el gobierno de turno,  dado que su conocimiento, en ese particular aspecto, es limitado y/o sus preferencias están enfocadas a otras alternativas de acuerdo con su ideología. Asumamos por tanto, un cierto nivel de falta de ecuanimidad en las decisiones, ya que están limitadas o facilitadas por los puntos de vista parciales de los que tienen la potestad de ponerlas en funcionamiento.

No es de extrañar entonces, que cualquier acción en el terreno político, pueda ser excesiva o incompleta según la interpretación y la proximidad de los ciudadanos. Al final todo queda reducido a resolver un problema logístico,  “casar” prioridades y recursos; siendo estos últimos - como sabemos - siempre limitados  o en ocasiones, como la actual, limitadísimos y con dificultades de financiación añadidas.

Por fantasías impropias, los gobiernos han “estirado mas el brazo que la manga”, con resultados francamente desastrosos; porque además, una buena parte  de los destinos han sido absolutamente inadecuados; mas propios de derrochadores, que de diligentes administradores. Puestas así las cosas, nos preconizan que hay que volver al sendero de la cordura y aplicarse/nos  una buena dosis de austeridad.

La alternativa es kafkiana, no se reduce solo a aplazar los proyectos, tiene una prolongación mucho mayor; plantea la renuncia a logros alcanzados y/o beneficios sociales de todo tipo; si la falta de proximidad acarreaba discrepancia en las acciones, que no será la absoluta lejanía, en el fondo y en la forma. Ahora para estabilizar el desequilibrio, el planteamiento es aplicar un porcentaje de disminución, en las partidas presupuestarias seleccionadas; dado el método tan poco aséptico, la repercusión es absolutamente asimétrica. Todo esto, sin aclarar la meta ni el alcance final de los ajustes; es como una novela por entregas, que se evidencia día a día con mayor fatalidad.

Lo malo de todo esto, es que vamos descubriendo poco a poco, que en Europa hay quien gana, seguramente en la medida que nosotros perdemos. (Ver enlace).

A quienes se desentendían de lo común o de todos para preocuparse de lo suyo (idíos), los atenienses del siglo V a.C., ya les llamaban idiotas. (Aurelio Arteta)





No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...