domingo, 29 de junio de 2014

Micropoderes



Dice Moisés Naím en su libro “El fin del Poder”: “El poder se les está yendo de las manos a los regímenes políticos de partido único y también a quienes gobiernan en las democracias más maduras e institucionalizadas. Está escapando de los partidos políticos grandes y tradicionales y fluyendo hacia otros más pequeños con nichos más focalizados y agendas muy específicas (los ecologistas, los independentistas, los anticorrupción, los antiinmigración, etcétera). Incluso dentro de los partidos, los jefes que toman las decisiones. Escogen a los candidatos y elaboran los programas a puerta cerrada, están dando paso a rebeldes y recién llegados, nuevos políticos que no han subido por el escalafón del aparato del partidista ni se han molestado en formar parte del círculo de protegidos de los líderes de siempre”.

Las organizaciones que olvidan su misión, acaban languideciendo. Cuando la distancia entre el compromiso y el desempeño es abismal; tarde o temprano se cosecha indiferencia o peor aún, desafección. Con un  efecto demoledor, de manera creciente pocos escuchan con verdadero interés, los argumentos que se esgrimen, porque saben con seguridad que son sesgados y carentes de fundamento real.

Sabemos perfectamente que la esencia de la política es el poder, se trabaja para ello y todos los partidos por lejano o cerca que estén de conseguirlo, lo interiorizan como meta. No me parece una aspiración inadecuada, creer que se tienen las soluciones para facilitar y mejorar la vida a los ciudadanos y elaborar un “plan” para aplicar acciones, en el periodo de mandato, para conseguirlo, parece una intención adecuada y elogiable. El problema se produce, cuando por razones nunca bien explicadas, las desviaciones con respecto al plan inicial comprometido, son tan relevantes, que las acciones que se desarrollan, acaban no teniendo nada que ver con el proyecto original

Cuando esta circunstancia concurre en el ámbito de la gestión empresarial, deben explicarse de forma clara cuales son las causas que impiden desarrollar los objetivos trazados y dada la diferencia tan acusada entre las  metas previstas y los logros reales, se conviene, habitualmente,  elaborar un nuevo modelo, contemplando todas aquellas circunstancias  no tenidas en cuenta en el modelo original. Y se comienza de nuevo con el mismo ímpetu. para tratar de lograr los objetivos “renovados”.

Lo que no tiene sentido es: a) no explicar de forma clara cuales son los motivos que impiden llevar a buen término el plan original, de modo que sea bien entendido por todos; b) no elaborar uno nuevo y continuar señalando día a día desviaciones no comprensibles puesto que se partía de premisas espurias c) alegar que vamos a mejor, pero sin poder cuantificarlo ya que no hay identificada nueva meta, que haya suplido las carencias de la inicial y d) improvisación cotidiana.

Cuando se dan estas circunstancias en el seno de la empresa,  habitualmente el Consejo de Administración, suele remover a los directores, no por haber planificado inadecuadamente, sino por no haber sido incapaces de establecer un nuevo proyecto, que reconduzca la situación, donde hayan sido salvadas las premisas omitidas en el anterior. Bien es verdad que la empresa pone en riesgo su propio patrimonio y su continuidad como negocio; circunstancia que no se da en la política, donde la remoción solo es posible con otras elecciones, ya que en un partido político es difícil que se reconozca error o se evidencie una deficiencia, sustituyendo a quienes aparentemente son responsables de ello.

En estas circunstancias cobra relevancia lo que dice Naím: “De acuerdo con los principios del pasado, los micropoderes deberían de ser tan solo irritantes, transitorios y no tener mayores consecuencias. Al carecer de escala, coordinación, recursos o prestigio previo, no deberían ni siquiera participar o, como mucho, solo deberían hacerlo poco tiempo antes de acabar aplastados o  absorbidos por uno de sus rivales dominantes.  Pero no es así. De hecho en muchos casos está ocurriendo todo lo contrario. Los micropoderes están bloqueando a los actores establecidos muchas oportunidades que antes daban por descontadas. En ocasiones, los micropoderes incluso llegan a imponerse a los actores largamente establecidos”.

1 comentario:

impersonem dijo...

Hay muchos macros que nacieron siendo micros...

Hay muchos micros que al conectarse (en información e intereses) hacen un macro...

Bueno lo dejo aquí, porque no estoy seguro que lo que estoy diciendo tenga algún sentido...

Saludos

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...